Mientras voy
leyendo la novela Los Miserables, luego de pasar varios capítulos del libro, me
atreví a ver la película sin haber culminado la lectura. No quería pasar por
alto la experiencia de disfrutar de la producción y la fotografía de este film
en la pantalla grande.
Sin embargo, y
lo confieso, sí lloré. Es que era algo inevitable, la música tan dramática, y
conociendo el recorrido que traía cada personaje, es difícil no crear una
especie de simpatía por cada uno de ellos, es como si los hubieras conocido en
la esquina de tu casa, y cuando sucumben en el final de sus historias pues
estás ahí típico panita en su entierro compartiendo un cafecito con sus
familiares y dando el sentido pésame.
Confieso que no
he visto ninguna otra adaptación de esta novela clásica, y no voy a discutir
sobre los detalles omitidos, ni los alterados, cosa predecible en toda
adaptación, no se puede decir que el espíritu de la obra de Víctor Hugo no está
presente en esta producción.
Pero vamos a mirar
con honestidad aquello que tantas personas han criticado, y creo que con
bastante razón, y es el hecho de musicalizar de manera exacerbada una historia
que reclamaba más diálogos y menos cantos, muchos de ellos repetidos con una
misma melodía.
Llegó en un
punto en que la reiteración de los actores hinchando el diafragma me quitaba el
encanto y la fuerza de la historia, sólo por el vil motivo de hacer más
dramático lo que ya era dramático per se, y yo ya dejaba de mirar a los
personajes sino a los actores, es decir, un ligero divorcio con la historia.
Creo, sin duda, que esa fue la razón por la cual el director Tom Hooper, no
logró más éxito con esta pieza que pintaba como la histórica producción del año
pasado.
No obstante,
rescatemos los puntos a favor de la película, comenzando por los actores
reconocidos y aquellos que sorprendieron, comenzando por la querida Anne Hathaway que por supuesto brilló, el
magistral trabajo de Hugh Jackman dándole vida a un personaje bastante
complejo, y por supuesto Amanda Seyfried, aunque el caso de ella no era
sorpresa, ya se sabía que canta como lo demostró en el otro musical “Mamma
mía”, la nota discordante fue Russell Crowe, a quien se le vio haciendo un gran
esfuerzo para dar la impresión de que cantaba con fuerza. La sorpresa la puso
la actriz inglesa Samantha Barks, desconocida para la mayoría del público
venezolano, pero que al parecer los musicales han sido su fuerte y así lo
demostró haciendo gala de su voz en una de las mejores escenas de la película.
Otro de los aciertos de Tom Hooper fue convertir a la dupla de Helena
Bonham Carter y Sacha Baron Cohen, en el toque humorístico de la película al
representar al alocado matrimonio Thenardier. Ya con la simple aparición en
pantalla del actor inglés rompía con todo el drama y le daba suavidad a la
historia para que el público pudiera digerirla con mayor placer.
Y por favor, no dejemos de mencionar la producción, el cuidado de los
detalles, la fotografía tan impecable que te lleva al infierno de cada uno de
estos personajes creados por la genialidad de Víctor Hugo. Causa curiosidad que
no fuera nominada en la categoría de fotografía para los premios Oscar,
inclusive superada en la categoría de dirección artística por “Lincoln”,
aspectos incomprensibles. Ahí quedé, entre suspirando y molesta, más diálogos,
menos canciones, y por favor actores que de verdad canten.
3 comentarios:
Hola, Karlita.
Con respecto al exceso de música, si no me equivoco, es debido a que la obra teatral musical es así. Música de principio a fin. Ésta es una versión o adaptación al cine de la obra teatral.
Y es que un musical 100% "musical" es una de las variantes de este género (otro caso como éste es JESUCRISTO SUPERESTRELLA, por ejemplo).
Y con respecto al trabajo vocal de Russell Crowe, a mí -como cantante que soy- me pareció impecable su trabajo. Es mi punto de vista (y de oído... jeje).
Rosana Mottola.
Oye linda bienvenida por esta esquina. Qué bueno que me comentas el post. Pues claro, en cuanto a canto ahí me llevas una morena, sólo lo pongo como espectadora y lo que percibí ;)
hola... bueno yo tambien pienso que el hecho de que hallan respetado con totalidad la adaptacion de broadway es digno de admirar, la historia va contando por si sola a traves de la musica las relaciones entre los momentos vividos por los personajes, por ejemplo cuando esta muriendo Fantine la cancion que canta esta en la melodia de "on my own" cantada por eponine mas adelante, y eso demuestra que el momento que viven se relaciona por la soledad. el trabajo de russel crown me parecio digno de admirar. Lo que tambien pienso es que no es una pelicula para todo el mundo,es para los amantes de los musicales en especifico y para aquellos que aman la obra de victor hugo y la adaptacion de broadway. :D
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